CONSIDERACIONES BÁSICAS

Mucha gente que carece de recursos económicos para operarse con buenos médicos no saben que la mayoría de las intervenciones quirúrgicas son una cosa sencilla y fácil de hacer por uno mismo teniendo las herramientas adecuadas y usando un poco de sentido común.

Como probablemente sea la primera vez que Usted mismo se va a operar, debo recomendarle que por ningún motivo se ponga nervioso, ni por ser su iniciación en el campo de la medicina ni por su condición de paciente. Tenga cuidado antes que nada de desconectar el teléfono, porque no hay nada más incómodo que en plena operación tenga usted que salir afuera para que después le digan que es equivocado.

Antes de cortar seleccione previamente el punto marcando con unas rayitas y una "x" en el sitio de corte. Por otro lado no se deje intimidar en ningún caso por el dolor. Un buen sistema para mitigarlo es hacerse la idea de que ese dolor lo está sintiendo otro, y ha usted le han dado la posibilidad de saber lo que el otro siente. De esa manera hasta es probable que se ría.

Para toda operación debe tener a mano una hojilla bien lavada, unos trapos limpios, una aguja que no esté oxidada, hilo de nylon corriente, mercuriocromo, alcohol o loción de afeitar y una docena de ganchos para tender ropa.

OPERACIÓN DE UN FOLÍCULO GÁSTRICO

Acuéstese en una mesa en posición horizontal y relájese. Levante el tronco dejando relajada la parte abdominal. Debidamente y previa marcación con el bolígrafo clávese la hojilla a una cuarta del ombligo hacia arriba y a la derecha, cortando profundamente carne unos 10 centímetros dos o tres veces, hasta que quede abierta la pared abdominal Usted verá el hígado, es fácil de conocer ya que es muy parecido al del cochino.

Una vez abierto el abdomen póngase los trapos alrededor de la herida para que absorban la sangre. No se ponga nervioso, inmediatamente cierre las cabezas de las venas y las arterias apretándolas con ganchos de ropa. Parada la sangre métase la mano y empiece a tantearse entre el hígado y el brazo hasta que note una protuberancia callosa, típica de los folículos gástricos. Localizado el folículo meta la otra mano con un alicate bien limpio y apretando bien jálelo con fuerza sosteniendo el hígado con la otra mano para que no se le venga junto con el folículo. Cuando lo tenga afuera fíjese bien que es de un color amarillo ocre, como paraulata desteñida. Tenga cuidado de no haber arrancado la vesícula; en todo caso, vuélvala a meter rápido donde estaba que ella se pega sola.

En caso de que la operación haya sido exitosa, rellene el huequito del folículo con plastilina y espere un rato hasta que se endurezca. Descanse volviendo a la posición horizontal sin dejar de mantener relajados los músculos. Cuando sienta que ya la plastilina se ha endurecido amarre con un hilo las cabezas de las venas meta la grasa otra vez en el vientre y cierre la capa muscular. Luego cosa la piel con el hilo corriente. Pásese los trapos con mercuriocromo por las heridas y descanse. Se recomienda una convalecencia de una o dos horas según sienta o no dolor en la herida.

CIRUGIA PLASTICA DE CARA

Córtese con la hojilla a lo largo de las arrugas que desea eliminar. Seguidamente estírese el pellejo por la parte de abajo de la papada y sostenga con los ganchos de ropa el cuerito sobrante. Córtelo nuevamente y luego lávese bien la cara con alcohol para impedir infecciones. Cuando esté bien seco primero las partes de abajo y luego prensando la piel, cósala arriba con el nylon transparente para que no se le vean los puntos. Maquíllese un poco mientras estos se secan. La operación debe repetirse cada 2 o 3 años según el proceso de deterioro.

EXTRACCION DE UNA MUELA

Cierre la puerta de su cuarto para que no lo molesten. Coja un alicate y métaselo en la boca agarrando fuertemente la pieza que desea extraer. Vaya aflojándola poco a poco dándole tirones hacia los lados y con cuidado de que no se parta la raíz. Cuando la sienta floja, jálela duro de un solo golpe, como si fuera de otro. Si la muela se le parte vaya sacando los pedacitos uno por uno y al final hágase unas gárgaras de creolina u otro desinfectante y escupa los buches con los pedacitos de muela. Si se trata de una pieza de abajo, lo mejor es utilizar la vieja técnica de amarrarla con una cuerdita de pabilo con la otra punta al pomo de la puerta. Luego corra hasta que la muela salga con el tirón. Como la muela es de hueso es más recomendable usar guaya en lugar de pabilo.